[♪] [♪] [♪]

>>¿cómo soy? ¿cómo soy para ti? no sé como soy para los hombres, dímelo. [♪] [♪] [♪]

¿así soy? [♪] [risas]

[♪] ¿de verdad somos una pareja como las demás?; me siento tan rara: no sabía como era esto. >>¿te gusta? >>me gusta la alegría de gustar. >>¿y qué más? >>¿de qué lado dormía ella? [risas]

>>y tú, ¿de qué lado duermes? >>en el centro. yo siempre he dormido sola. [♪] martíyo nací en un barrio muy viejo. mi casa era... no sé cómo era; lo que mejor recuerdo es el

día que me despedi de mis padres en la estación de trenes: mamá lloraba, papá me miraba muy serio, mi hermana sonreía contenta: "méxico, vivir en méxico" ¡qué maravilla! [♪] [♪] [♪] [♪]

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>>¿qué sientes, alejandra? calor, calor muy rico. >>y después

¿qué vas a sentir despues? >>hubiera jurado que me lo ibas a preguntar... ¿después?; y tienes razón: después es algo que esta muy cerca. >>él es joven, bastante joven. >>yo también, todavía soy joven... todavía. >>él es diferente, o tú eres diferente. hay un universo de distancia entre ustedes dos, insalvable, difícil. alejandra, ya te han golpeado mucho y este golpe podría ser... >>definitivo. >>de verdad ¿qué sientes ahora?

>>calor; y tal vez un poco de miedo y de frío. [♪] martí¿por qué? de verdad, ¿por qué, alejandra? >>alejandra. cuando pronuncias mi nombre suena tan bien; cuando lo pronuncian otros. todo esto me ha llegado demasiado tarde: es inútil insistir. >>¿es inútil vivir?. >>¿para qué? ¿por quién?. >>por mí. >>nunca te dijeron que las mujeres envejecen más rapido que los hombres; y por eso el hombre siempre debe ser mayor.

>>yo no soy un niño, alejandra. >>pero yo tengo... por favor, martín, no seas cruel; me duele decirlo, no me obligues. mírame... bien; casi podria decirse que soy una... >>una mujer hermosa; sí, alejandra; la vida empieza cualquier día: para ti y para mi empezó cuando nos conocimos. ¿qué edad tenemos, entonces?. un mes, unas semanas... >>40 años... más. >>un mes, dos días, seis horas, minutos. >>voy a llorar, martín. >>ríe; anda, vamos a reir, tú que sabes tantas cosas, ¿no sabes que solamente

se vive una vez? >> llévame contigo, sácame de méxico. >>sí, iremos a guanajuato; yo soy de ahí. >>no, guanajuato está muy cerca; llévame más lejos. >>sí, más lejos; bueno, más lejos no podría. >>yo sí puedo; si, lejos, lejos; donde nadie nos conozca y donde estemos tranquilos solos, y donde no haya lugares que nos recuerden nada. >>sí; trabajaré mucho y entonces... >>sí. a vivir, a reirnos, a bailar... a viena. >>a roma. >>¿de dónde vienes? ¿de dónde? >>nunca te levanté la mano cuando eras mi hijo; no me obligues a hacerlo ahora que eres un extraño. >>se está viendo con él. >>lo que no entiendo es por qué no han tomado la decisión de dejar esta casa. ¿no se les ha

ocurrido pensar que vivir los tres juntos terminaría siendo insoportable? >>esta es nuestra casa; al menos nos queda el privilegio de ser hijos del dueño de la casa. >>te equivocas, gustavo: yo soy la hija del dueño de esta casa; mi padre construyó esta casa y el tuyo la habitó durante 20 años; eso es todo. pero no se preocupen, yo soy la que se va; sí, con él, ¿qué más puedo pedir? alguien que me acepta, que me tiende su mano, que me ofrece un afecto. >>que te sacara hasta el último centavo. >>no lo creo. >>¿qué crees? ¿qué se ha enamorado de ti? no te das cuenta que un hombre que gana 1700 al mes no puede desperdiciar la única oportunidad de hacerse rico. >>acepto que no me quieras, gustavo; y ya que no soy tu madre, déjame hacerte una pregunta de mujer: ¿no te gusto?

¡no! reacciona como un hombre; es una mujer la que te está hablando; ¿me encuentras tan horrenda y tan vieja como para afirmar que nadie se fijaría en mí? pues no lo soy, yo sé que aún gusto, que aun atraigo a los hombres; y, si nunca antes había puesto los ojos sobre ninguno, era porque me bastaba con mi papel de madre; pero como todo eso se acabó y como ustedes lo aniquilaron, decidí portarme como una mujer; y ya lo soy; y les puedo decir que él me pidió irme con él por algo más de los millones que tengo. >>no estés tan segura. >>pues sí que lo estoy. >>¿quieres ponerlo a prueba? te atreverías a jugar con fuego? sabes que puedes perder; no confíes tanto en él; tienes miedo, alejandra. >>no, no dudo de él; no tengo

miedo, ¿quieren jugar? háganlo. son ustedes los que van a jugar con fuego. les voy a dar la oportunidad, se las dejo servida en bandeja de plata: martín durán vendra por mí en un momento; yo subo a hacer mis maletas; no titubeen, hagan su oferta y luego me cuentan cuál fue su demanda; les queda mucho por aprender de la vida; su padre y ustedes me dieron una lección, ahora les ofrezco otra, no se la pierdan, quizás tocando fondo, puedan subir como subí yo cuando estaba más hundida.

>>¿y si se hubiera enamorado de ella? >>que lo pruebe. >>¿si la amara de verdad? ¿qué le ofrecerás? ¿cuánto? >>¿cuánto es mucho para un empleado de 1700 pesos al mes? [timbre de la puerta]

>>¿con qué dinero se van? >>por fin. no crean que no lo entiendo; en cierto modo tienen razón: ella es su madre y yo no soy la clase de hombre que ustedes querrían para remplazar a... su padre. >>¿ella no le dijo nada? >>¿de gustavo y de mí?

>>¿no le dijo que nosotros somos... que no somos...? >>¿fáciles? creo que lo mencionó; y no lo son, ¿verdad? >>¿y usted? cómo es usted? >>así. >>¿qué es usted, señor durán? >>uno más; no tengo nada especial. >>pero le ha ocurrido algo muy especial; y pensó sacar provecho de ello. el horror de encontrar a su esposa muerta en brazos de otro, se vio compensado con la posibilidad de algo que podría sacarlo a usted del hoyo. >>¡gustavo! >>usted es pobre, señor durán. >>muy pobre. >>¿qué se siente? >>¿siendo pobre?

nada: aburrimiento. >>ha de ser como estar en una cárcel; uno debe querer huir, escaparse, liberarse y no se puede. >>no hay forma: todas las puertas están cerradas. >>y se mira al mundo por una rejilla. >>¿y qué se ve? >>el sol, el mar, los coches, las tiendas, los cabarets. >>y todo eso está muy lejos. >>entonces surge la rabia; y crece la rabia. >>y muere; porque no hay nada que se pueda hacer.

>>pero la imaginación sigue funcionando, ¿qué se imagina en la miseria, señor durán?. >>todo lo que no se tiene. >>por ejemplo ¿qué? ¿una piel bronceada? >>una mujer hermosa. >>¿cómo quien? >>¿cómo es esa mujer hermosa? >>tiene toda la dignidad del mundo; se le podría reconocer en cualquier parte. donde se parara, la gente diría: "esa es una dama, una señora". >>¿y es bella? >>mucho: sus ojos son profundos, sus manos son suaves y sus labios lo tienen todo. >>su piel impone, su cabello es ligero... >>y su voz es honda, penetrante, convincente. >>y cuando se pone de pie, uno diría que el mundo entero se ha puesto de pie.