- a cualquier hora, zuk., yo me quiero ir a mi casa con la conciencia tranquila, en paz, de que cumplí con mi deber. a ti que parece que te encanta la guerra. - oye, ¿me puedes explicar por qué estás tomando el mezcal como si fuera agua? ¿por qué tan preocupado? - no sé de qué hablas. - ah, bien. con todo lo que hablamos, tenemos preparado un muy buen caso para tu defensa. ¿alguna duda? - no, no, no, ninguna. me encanta tu estilo. me recuerda mucho a mí cuando tenía tu edad. me imagino que es muy difícil mantener relaciones con la gente, ¿cierto?, parejas... - ¿por qué lo dices? - ah, porque es que, al igual que yo, se ve que eres bien controladora. todo lo querés tener así, bajo la mano. en tu casa, en tu vida, tu trabajo, todo. mucho cuidado, porque a la gente no le gustan las personas así. - en pocas palabras, ¿me estás diciendo neurótica? - no, home, no. las clasificaciones que hacen los loqueros a mí no me gustan. pero sí he tenido experiencias, parejas, uf... y todos salen corriendo al ver lo dominante